Mucho se habla de cual será el nuevo gran paso que dará Internet: navegar con la mente, mover con las manos las páginas al estilo Minority Report, un interface basado en hologramas, Internet 3.0…
Sin animo de convertirme un un pedante gurú de este tema, si que me gustaría compartir con vosotros mis impresiones a este respecto. La revolución que tiene pendiente Internet es el salto a dispositivos móviles.
Como muchos ya conocéis, ahora mismo se puede navegar por Internet desde la inmensa mayoría de dispositivos móviles que salen al mercado. Pero no es una experiencia total, no es completa. Esto se debe, en gran parte, a que los desarrollos no se realizan pensando en este tipo de accesos. Para una experiencia completa como la que yo propongo deberían de mejorar la interpretación de los estándares XHTML, los interfaces de navegación, la entrada de datos, el poder acceder a contenidos Rich-Media (léase Flash), y el contar con una resolución y tamaño de pantalla decente. Y, por último, disminuir los costes de conexión.
Ahora mismo todo esto está cambiando. Los accesos desde dispositivos móviles suben como la espuma (en España, el 26% de la población que acceden Internet usa su móvil, según el estudio de comScore Networks), los interfaces evolucionan hacia pantallas multi-táctiles, simplificando la navegación y la introducción de texto desde teclados qwerty (bien virtuales sobre pantalla táctil, o bien físicos). Se rumorea que dentro de poco podrán ejecutar Flash Lite en páginas web. Las pantallas crecen de tamaño gracias a la capacidad táctil y de resolución conforme avanza la tecnología. Cada vez son más los dispositivos móviles con posibilidad de conexión WI-FI, y, a su vez, estos puntos de acceso están más difundidos.
Todo esto nos conduce inexorablemente a que dentro de unos pocos años la experiencia de navegar desde dispositivos móviles pueda ser tan completa como navegar desde el equipo de casa o la oficina. Pero recordemos que uno de los actores que juegan aquí un papel fundamental son los desarrolladores web, que deberán realizar sus proyectos con la hibridez necesaria para garantizar una experiencia total tanto en dispositivos móviles como fijos.
Podéis ampliar información en blogs como Infonomadas.
Rafa, muchas gracias por la mención. La verdad es que a medida que se han ampliado los dispositivos conectados a internet, la adaptabilidad de los diseños parecía la solución, pero al final esa misma adaptabilidad hace que no se vea bien en ninguno :)
Antes nos tocaba hacer los diseños en versión Flash y en html (menuda locura), ahora tiene que ser compatible con Ie6,7,Firefox, Safari, chrome.. aparte de las versiones “especiales” para PDAs, Móviles, Iphones.. ¡que miedo me da ver tantas versiones! :)
¿Por que antes no importaba hacer una web entera en flash y otra en html (doble trabajo) y sin embargo cuesta tanto vender una versión optimizada para móviles? La mayor baza a la hora de proponer versiones optimizadas para móviles (blackberry, iphone, etc…) es ver si el que toma las decisiones utliza una de ellas. Si el jefe tiene una, tienes el paso abierto :)
Un saludo y enhorabuena por el blog de nuevo Rafa
No hay de que, Pablo. ;)
Yo creo que será poco viable el ir haciendo diferentes versiones de un mismo desarrollo. Yo imagino que la solución pasará por realizar proyectos donde el contenido tenga independencia sobre la maquetación. Ya hay muchos estudios sobre este tema… De esta manera será mas fácil realizar adaptaciones a dispositivos móviles, ya que simplemente será darle un aspecto a ese contenido, y no realizar un desarrollo paralelo.
Estoy de acuerdo contigo: Si el cliente tiene un dispositivo móvil avanzado, seguro que entederá mejor la importancia de existir en Internet para accesos desde móvil.